Fallece Don Andrea Gallo, sacerdote italiano que consideró la homosexualidad como “un don de Dios”

Andrea Gallo o Don Gallo para sus allegados, ganó popularidad gracias a su defensa directa de los derechos del colectivo LGTB, llegando a ser reconocido como “personaje gay del año” en 2011, situación que contrastaba con su rol como sacerdote católico y que le supuso enfrentamientos con sus pares y superiores. La noticia ha causado conmoción en Italia, país en donde era tomado como referente moral de la izquierda italiana.

Don Gallo destacó entre su feligresía debido a su trabajo en favor de las personas pobres, así como por su facilidad de palabra y espíritu contestatario. Nacido en Genova, protagonizó continuas luchas por la población más desfavorecida, e igualmente se hizo cargo de la comunidad de San Benedicto, donde tuvo lugar diversos proyectos enfocados a la población marginada, víctimas de prostitución y trata de blancas, y personas farmacodependientes. 

Conocido como “el cura rojo”, “el padre de la acera” o “el cura no-global”, Andrea Gallo figura como una de las primeras personalidades públicas de Italia que manifestó directamente su apoyo al matrimonio entre personas del mismo sexo. Su continua defensa a las minorías sexuales destacó considerablemente en la sociedad Italiana. En 2009 hizo parte del desfile por el Orgullo Gay, celebrado en Genova, manifestando que “Estoy aquí con muchos chicos y chicas alegres y felices. Quien celebra el amor no está en contra de nadie. Estos chicos quieren salir del recinto de la homofobia. Hay un homosexual masacrado prácticamente cada día. Estos son ciudadanos que reivindican sus derechos”.

Para 2012 se encargó del lanzamiento de un calendario enfocado a la promoción de los derechos de las mujeres transexuales que ejercen la prostitución. En 2013, durante la realización de un encuentro organizado por la asociación LGTB “Noi naturalmente”, Don Andrea Gallo aseveró que la homosexualidad es un “don de Dios”, e hizo referencia a los derechos del colectivo, señalando que “no puede haber una auténtica democracia si no se reconocen los derechos de todos”.

Durante las elecciones primarias del centro-izquierda italiano, en diciembre de 2012, Gallo apoyó a Nichi Vendola, político abiertamente homosexual. Dentro de los posicionamientos de este, también destaca las declaraciones al momento de la dimisión por parte de Jospeh Ratzinger al papado en marzo de este año, al sugerir que la elección de un papa homosexual sería una “magnífica noticia”.

Fuente: dosmanzanas.com